En cuestión de movilidad interna, hay que diferenciar claramente entre los dos países:
👉 El servicio de transporte público de Israel es bastante bueno y te permite tanto llegar a los principales destinos del país, como moverte por las ciudades principales, con facilidad. No obstante, ten en cuenta que la mayor parte del transporte público no está operativo durante el Shabat.
💡 Para llegar a las ciudades principales, así como a los tres puntos fronterizos con Jordania, puedes visitar la página de la compañía de autobuses Egged. No obstante, hay que remarcar que el sistema de reservas de esta página está disponible solo en hebreo. Si quieres comprar tus tickets online, puedes seguir mi tutorial. También te será útil visitar la página de los ferrocarriles israelíes, los cuales conectan la mayoría de las ciudades del país, además de unir Tel Aviv con su aeropuerto en un trayecto de tan solo 10 minutos.
💡 Para moverte por Tel Aviv, lo mas fácil es coger el bus. Ten en cuenta que deberás haber comprado tu tarjeta RavKav antes de subir. Este medio de pago también sirve para los trenes. Podrás comprar y cargar tu tarjeta en las principales estaciones, así como en la mayoría de estancos y en numerosos colmados. También son buenas opciones de transporte por la ciudad la red de bicicletas y patinetes eléctricos.
💡 Para moverte por Jerusalén, lo más fácil es coger el tranvía. Podrás comprar tu billete en la misma parada antes de subirte.
👉 Aparte de esto, Israel también tiene una red de carreteras seguras y en buenas condiciones que te permitirá montar tu propia ruta en coche de alquiler. Eso sí, tendrás que pagar peajes.
👉 Las opciones de movilidad que ofrece Jordania, en cambio, son mucho más limitadas. Son muchos los puntos a los que no podrás llegar con el transporte público, así que lo más aconsejable es alquilar un coche y moverte libremente por el país. Recuerda que te será conveniente adquirir previamente el permiso internacional de conducir.
Las carreteras jordanas no son las mejores, las líneas y señales son escasas, pero en general están bien asfaltadas y son bastante seguras, no por las buenas prácticas de los conductores, sino porque conducen despacio. Es probable que te encuentres controles. Suelen pedirte la documentación y dejarte pasar sin más complicaciones.
