Índice de contenidos:
- Qué tienes que saber antes de ir…
- Qué ver y hacer en el desierto de Wadi Rum
- Cómo llegar
- Dónde comer
- Dónde dormir
Qué tienes que saber antes de ir…
El desierto de Wadi Rum se encuentra al noreste de Aqaba, a una distancia de 60 km (o una hora en coche), aproximadamente.
El área fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 2011, pero el famoso desierto rojo también es conocido por las distintas películas que se han rodado en él, entre ellas, Lawrence de Arabia (1962), Misión a Marte (2000), Planeta rojo (2000), The Martian (2015) y la reciente última entrega de Star Wars: Episodio IX – El ascenso de Skywalker (2019).
Wadi Rum ha estado habitado desde la prehistoria por diversas culturas, incluidos los nabateos, el antiguo pueblo ismaelita que tuvo por capital Petra (situada unos 100 km al norte) y cuya época de mayor esplendor abarca el período que va del siglo IV a. C. al I d. C.
Desde 2007, habitan el desierto varias tribus de beduinos, que se encargan de organizar ecoturismo de aventura para los visitantes.
Qué ver y hacer en el desierto de Wadi Rum
Para explorar Wadi Rum, la mejor opción es pasar, como mínimo, una noche en el desierto y unirte a uno de los tours organizados por los propios beduinos. De esta forma podrás explorar el desierto y, además, descubrir la gastronomía y el estilo de vida de los beduinos que lo habitan.
El Centro de Visitantes de Wadi Rum es el punto más cercano al desierto al que podrás llegar con tu coche. En el recinto, podrás dejar tu coche aparcado durante los días que vayas a estar en el desierto y, a la vez, este será el punto de encuentro donde te vendrán a recoger los beduinos de tu campamento.
Llegamos al Centro de Visitantes de Wadi Rum a media tarde. Aparcamos el coche y, en pocos minutos, Alí ya estaba allí para trasladarnos al campamento con su pick-up.
El primer contacto con el desierto rojo fue de lo más emocionante para mí, que llevaba tiempo queriendo vivir esa experiencia. Subida a la parte trasera de la pick-up, me quedé maravillada observando ese mágico paisaje lunar mientras el viento y la arena me salpicaban la cara. La hora era perfecta. El sol estaba empezando a ponerse y los colores de la arena y las rocas eran de un rojizo precioso. En pocos minutos llegamos al campamento, dejamos el equipaje y salimos a ver la puesta de sol desde lo alto de unas rocas. Todo un espectáculo.
Al poco rato, Alí nos llamó. La cena estaba preparada. Había muchos platos: carne, verduras, ensalada… Todo listo para combinar con el pan pita. La comida beduina es muy similar a la de sus alrededores, pero con un punto sutil de picante. Riquísimo.
Después de tomar un té y caminar un rato bajo las estrellas del desierto, nos fuimos a descansar. Puedes optar por dormir dentro de tu tienda o bien sacar la cama fuera.
Por la mañana, después de desayunar, nos fuimos a recorrer el desierto con Alí y su hermano. Cada uno conducía su 4×4 con un máximo de 4 personas a bordo, para compartir gastos.
Durante la ruta, nos paramos a explorar los rincones más emblemáticos del lugar.
Pudimos hacer un tramo de la ruta a pie, corriendo y disfrutando entre formaciones rocosas y dunas.
Nos paramos a comer.
I disfrutamos de la experiencia en 4×4 por el desierto.
Al regresar al campamento, agradecí mucho poder darme una ducha. Y, después de otra puesta de sol inolvidable, Alí nos preparó otra cena riquísima al más puro estilo beduino.
La mañana siguiente, después de desayunar, Alí nos acercó al Centro de Visitantes y emprendimos nuestra ruta hacia Wadi Musa – Petra.
Cómo llegar
La mejor forma de llegar a Wadi Rum es con tu propio coche de alquiler. Si procedes de Aqaba, te va a llevar 1h recorrer el trayecto de 60 km que los separa. Si procedes de Wadi Musa (Petra), tendrás que recorrer unos 100 km, lo que te va a tomar 1h y 45m, aproximadamente. Recuerda que podrás dejar tu coche estacionado en el Centro de Visitantes durante tu estada en el desierto. Los beduinos de tu campamento te vendrán a recoger allí con su 4×4, la mejor forma de recorrer el desierto.
Dónde comer
En los campamentos, los beduinos preparan comida casera tradicional para sus huéspedes. Muy rica. Además, no tendrás la necesidad de ir a comprar otras provisiones durante tu estada, ya que ellos mismos van cada día a abastecerse de botellas de agua y te las ofrecen gratuitamente.
Dónde dormir
Alojarse dentro del área del desierto, en un campamento beduino, es la mejor forma que hay de vivir esta experiencia. En nuestro caso, elegimos el Salma Desert Camp, el cual ofrece alojamiento a buen precio, transporte desde el centro de visitantes, comidas caseras, excursiones por el desierto y todo lo que necesites durante tu estancia. Lo mejor del campamento es la posibilidad de reservar una tienda con wc y ducha a muy buen precio.